News of the world: condenados a encontrarse

24 Feb News of the world: condenados a encontrarse

 

El británico Paul Greengrass se dio a conocer con «Bloody Sunday» (2002), una efectiva reconstrucción de los trágicos sucesos ocurridos en Derry en 1972, en los momentos más crudos del conflicto irlandés. Su carrera posterior ha discurrido por un cine de planteamientos más comerciales —varias entregas de la saga Bourne, un nuevo film sobre hechos reales como «United 93», con uno de los aviones abatidos del 11S—, pero siempre mostrando una gran solidez narrativa y, lo que para mí es más importante, un continuado respeto por la inteligencia del espectador, al tratar de articular todos sus relatos dentro del verosímil escogido o adecuado para cada ocasión.


Unas virtudes, más raras en el cine de lo que su sencilla formulación podría hacer pensar, que suman y siguen en esta película con formato de western, aunque poco adscrita a las constantes del género —al menos en una concepción clásica—, ya que su objetivo dramático son las contrastadas relaciones entre un hombre que se encuentra en la última etapa de su vida y una adolescente, casi una niña, que todavía tiene toda la vida por delante. Una relación que hemos visto en muchos relatos de la ficción y que, en esta ocasión, adquiere esa necesaria singularidad a través de lo atormentado de sus personajes, ambos desplazados del mundo al que creyeron pertenecer; y de las excepcionales circunstancias de su presente, el hombre se gana la vida leyendo periódicos de pueblo en pueblo —de ahí el título de la película— y la niña fue secuestrada con muy pocos años por los indios, tras la matanza de toda su familia, y ahora trata de reintegrarla en una sociedad, la de los blancos, que no ya no reconoce como propia.


A la precisión humana con que narra la evolución de estos dos personajes condenados a encontrarse hay que añadir la ajustada descripción que nos proporciona del Sur recién derrotado en la Guerra de Secesión, «ocupado» por las casacas azules y pleno de cotidianas servidumbres para sus, moral y económicamente, deprimidos habitantes. Una mirada realista y bastante novedosa sobre este paisaje que incluye valiosos detalles, entre ellos una diversidad lingüística que el cine ha obviado la mayoría de las veces.


En el otro lado de la balanza podemos colocar algunas socorridas soluciones de «salvación en el último minuto», ya sabemos que (desde siempre) el cine le tiene mucha afición a este odioso recurso, y también el ocasional abuso de los recursos digitales y los drones en detrimento del paisaje real, a ras de suelo, de muchos westerns clásicos. También puede que algún espectador hubiera preferido un desenlace más amargo, pero a mí me encanta el elegido, aunque tenga un punto de caramelo. Relativos reparos que no impiden que nos encontremos ante una estimable película, con un estupendo Tom Hanks, cuyo argumento guarda ciertos ecos del clásico «The searchers / Centauros del desierto» —aunque se trata de un relato completamente distinto—, que el cineasta quiere reconocer en un emotivo plano que rinde homenaje a una de las imágenes icónicas del film de John Ford.

Tags:
No hay comentarios

Publica un comentario